Estimada ansiedad,
Mi disgusto con tu comportamiento ha llegado a un nivel insoportable, si queremos que esta relación funcione es tiempo de establecer límites. Si bien reconozco tus aportes colaborándome a finalizar tareas, apurarme para llegar a tiempo y moviéndome de lugares donde ya no pertenezco, tus sobredimensionados tratos cuando pierdes el control me hacen daño.
Puedes ser irritante, agotadora y demasiado imaginativa. Son innumerables las veces que me has llevado mentalmente a situaciones que ni siquiera han sucedido, comprometiendo mis relaciones, sueños y espontaneidad con la vida.
¡No podemos seguir así!
Sé que quieres ayudar, pero creo que no estás entendiendo que crear infinitas situaciones no va a evitar que algún rato fallemos. No se trata de eso. Vamos a fallar… pero, ¿sabes qué? Vamos a poder seguir adelante con algún aprendizaje. Quizás me digas que lo único que intentas es “prevenir” o “estar listos para lo que venga”, pero no te das cuenta que ese enorme cuidado, solo me ha vuelto más insegura. Quizás yo también te expuse a más información de la que debía o que sucedieron cosas en el camino que te pusieron los pelos de puntas. Es verdad, pero, es tiempo de dejar de mirar atrás (y adelante), y comenzar a mirar dónde estamos parados. Y confiar que podremos caminar cualquier terreno que nos toque atravesar.
¿Qué te parece si mides esas señales de advertencia? En vez de enviármelas cada hora, las envías solo cuándo percibes que efectivamente me encuentro en problemas. Comenzaré a mandarte información precisa y útil para que entiendas más sobre mis entornos. Créeme esta vez son más sanos. Esta vez me conozco mejor y sabrás cómo responder.
La batalla que hemos estado librando hasta ahora es estúpida, ha sido tú contra mí… No nos dimos cuenta. Qué te parece si nos convertimos en una poderosa dupla, esta vez tú y yo contra lo que se ponga en frente. Sea lo que sea. Olvídate de los resultados. Enfoquémonos en esta relación y te aseguro que el presente llegará con alegría o con lecciones.
Gracias por tus ganas de protegerme durante tantos años. A pesar de nuestros tropiezos, tengo presente que solo quieres ayudar.
¿Volvemos a empezar?
Twenty one pilots tiene de musa a su depresión. Tú a la ansiedad...
Felicidades por volver una debilidad en fortaleza!